Mi recomendación: desde la cuna hasta los 36 meses
Ya tenía ganas de enseñaros esta joyita que trajeron los Reyes. Sospecho que me lo paso mejor yo que Bubi jugando con él...jejeje. La verdad es que ahora mismo todavía es pequeño para disfrutar de todas las posibilidades que ofrece el cuento, pero le encanta manipular las páginas y chupar a Jef el granjero.
Se trata de uno de los libros de tela de Lilliputiens, que a mí me recuerdan a un quietbook. No tiene texto, sólo algunas onomatopeyas, pero es fácil descubrir que se trata de un día en la granja, acompañando a Jef en sus tareas.
El granjero es un perro cuyo peto y cesto encontramos en la primera página al abrir las puertas de la caseta de aperos.
Una vez preparado, se sube al tractor del que cuelga una llave de tela para arrancarlo, e inicia su trabajo por la granja.
La primera parada es en el gallinero para recoger un huevo que ha puesto la gallina, saludar a los patos, a los pollitos y a las ranas que se esconden bajo ellos, y fijarse en el zorro que los observa hambriento desde detrás de la valla.
A continuación es el momento de acercarse al establo para ordeñar a la vaca (que tiene diferentes texturas) y recoger la botella llena de leche.
Una vez atendidos los animales, Jef se dirige al huerto para recolectar las patatas y las zanahorias.
Todavía necesitamos hacer un hueco en el cesto para meter la pera y la manzana que recoge de sus árboles frutales.
Por último nuestro granjero se dirige al campo en el que se encuentra el caballo comiendo y los cerditos revolcándose en el barro, para recoger la lana de la oveja que convierte en un chaleco muy calentito.
Y así, abrigado con su chaleco y su cesto lleno de cosas, se dirige a su puestecito en el mercado donde coloca todos los productos recogidos en la granja y los vende al pequeño conejo que se acerca a comprar, paga con una moneda de 2€ y va metiendo las cosas en su cesta.
Ahora ya entendéis porqué por el momento me lo paso yo mejor que Bubi...jijiji. Yo voy llevando a Jef por la granja a medida que él pasa las páginas y metiendo en la cesta los productos, mientras él se encarga de vaciármela una y otra vez.
Lo cierto es que cualquiera de los títulos de Lilliputiens son garantía de calidad y de horas de juego y diversión.
De bebés juegan con él como con otro libro de tela cualquiera, pero a medida que pasan los meses van pudiendo utilizar todos los elementos al ir desarrollando su motricidad fina, hasta llegar a verbalizar la historia a partir de los dos años.
¿Tenéis algún libro de tela similar?
De esa editorial conozco buenos días conejo (quizás me estoy inventando el nombre pero es de un conejitos que se despierta y se viste, desayuna, va a clase, a jugar y abraza a su papá) son preciosos
ResponderEliminarCreo que el que comentas se titula "Buenos días pequeño conejo"
EliminarPero también hay otro titulado "Conejito buenas noches" que repasa todos los rituales de los niños antes de irse a la cama, utilizando para ello el muñeco del conejito que va cumpliendo con cada rutina a lo largo de las páginas.
Y totalmente de acuerdo contigo Carla, son geniales.
Creo que el que comentas se titula "Buenos días pequeño conejo"
EliminarPero también hay otro titulado "Conejito buenas noches" que repasa todos los rituales de los niños antes de irse a la cama, utilizando para ello el muñeco del conejito que va cumpliendo con cada rutina a lo largo de las páginas.
Y totalmente de acuerdo contigo Carla, son geniales.